lunes, 27 de mayo de 2013

SESION 13. LA SABIDURIA REFLEJA LO QUE EL OTRO SIENTE.

Hola chicos, primero que nada, espero que todos hayamos podido conocernos a nosotros mismos un poquito más en este semestre.
La semana pasada comentabamos que en su mayoría, estamos condicionados un poco por la química que rige sobre nuestras emociones, estados de ánimo y demás delirios. Ofreciendo una conclusión relativamente definitiva y absoluta, diríamos que, esencialmente somos energía que sube, baja y se transforma a veces de formas imprevisibles.
 Me parece que a veces, como seres humanos, capaces de un millón de cosas intelectualmente hablando, a veces se nos olvida el ligero pero no menos importante detalle de que, somos esencialmente pasión y emmoción, lo cuall nos uede bloquear a la hora de querer concluir con alguna tarea, cosa que nos pasa a  muchos al final del semestre, como es el caso de mmuchos de nosotros el día de hoy y nos puede llevar a quebrarnos en algún punto (no hace falta decir que me identifico totalmente con esto).
En fin, a veces pienso en todos ustedes y en mí y me doy cuenta de que todo pasa por algo, los momentos que pasamos y los errores que hemos cometido no son malos ni buenos, a veces sí, son pequeños destellos de felicidad, el equilibrio nunca llega a ser completo y todo es parte de la energía que fluye, son reajustes de energía.
Algunas veces los fantasmas crecen y se dejan ver como sombras espeluznantes que parecieran no acabar nunca, pues se manifiestan en forma de situaciones catastróficas, una seguida de la otra, pero, aunque parezcan no tener fin, esos momentos nos sirven para reconciderar las cosas, observar las cosas a través de un espejo diferente, a veces más claro y volver a la batalla.
Como saben, y para los que no lo saben, me encantan los cuentos de hadas y, aunque este semestre no ha sido precisamente un cuento de hadas, pues ha sido más parecido a un cuento tipo Stephen King (los odio), cargado de frustraciones, anguatias e intensas ganas de gritar (al menos de mi parte), ha sido también el encuentro con una batalla donde por más que te golpeen, quieres seguir peleando (o esa es mi forma de lidiar con esto hasta ahora), lo que quiero decir en concreto, es que no se preocupen, que todo va a estar bien y que todo es cuestión de saberse conectar con nuestras emociones.
A lo mejor me he desviado del título original de esta entrada, pero lo cierto es que, cuando aprendes a aceptar tus emociones, las cuales van siendo influenciadas innevitablemente con las de los demás, aprendes a comprenderlos y eso, ya es de por sí sólo un verdadero milagro. Así yo concluiría este semestre y espero haberles dejado algo en que pensar. Eso para mí, es amor verdadero, lejos de cualquier estereotipo de Disney o cualquier otra fantasía.




3 comentarios:

  1. Sería interesante retomar el tema de los fantasmas en nuestra cabeza, sobre todo los relacionados a la teis. Ideas que se convierten en monstruos que nos afectan en la medida que no los enfrentemos y buscamos su origen. Hay que recordarle esto a la profesora Andrea, si la autoevaluación no se extiende demasiado.

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    1. El tema me parece sumamente interesante, máxime ahora con esto de que me he puesto a hacer tesis sobre algunas ideas sobre el vampirismo (otra clase de monstruos?)

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  2. Vaya que me afecta; escribí Teis en lugar de TESIS.

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